22 febrero 2012

Yo elegí quererte y todas las consecuencias que eso conllevaba. Elegí que tú fueses la persona que llenase mis días, elegí que tu olor era el que mejor le venía a mi ropa, yo elegí que me comieras a besos, elegí también tu voz ... Elegí llorar por ti de vez en cuando, elegí creerme tus verdades y creerme a medias tus mentiras, elegí que no quería otros abrazos, que no quería otras manos que me tocaran, elegí nuestro mes del año y nuestro día del mes.
Elegí que tú fueras mi locura y que tú, precisamente tú, fueras el que me calmara cuando tenia uno de mis ataques, elegí llenar el silencio con nuestra risa. Elegí las idas y venidas, las despedidas, elegí la impotencia, la incertidumbre, elegí el miedo a fallar y los impulsos, elegí las miradas, elegí temblar, elegí hacerme adicta a sus palabras, al corte de tu voz sonando dentro de mi cabeza, como la siento ahora mismo aquí, muy dentro de mí, tan dentro que diría que estás aquí a mi lado... Elegí conservar intacto cada momento, y dejar huella de lo que algún día fue. Elegí que mi mayor hobbie era verte y besarte hasta que a los dos nos dolieran los labios... Elegí darte todo, elegí hablar de nosotros cuando hablaba de ti, elegí ser fuerte y luchar por un solo motivo. Elegí darte todas mis oportunidades y perderme por mi estupidez las tuyas, elegí quedarme con tus manías, tus defectos y tus caricias. Elegí perdernos en cualquier lugar del mundo, y aun tengo ganas de perderme contigo debajo de cualquier edredón… 
Elegí también tu respiración en mi oreja derecha y en la izquierda, y en cualquier zona de mi cuerpo, elegí ir lento, y sentir la pasión a gran escala, elegí estremecerme con tus caricias, elegí no ponernos límite. Elegí el sabor agridulce de las discusiones que acababan en abrazo, elegí encontrarte en lugares donde nunca estaría, elegí seguir queriéndote aún cuando ya no estabas, y a día de hoy sigo haciendo lo mismo... porque yo elegí arriesgar y jugármela por ti. 
Y sinceramente, lo elegí... 
Y no me arrepiento de nada.

07 febrero 2012

...que no tiene caso reccionar así?
Pero si eres POESÍA encerrada,












entre letras de un "quizás"...

03 febrero 2012

Vino, primero, pura,
vestida de inocencia.
Y la amé como un niño.

Luego se fue vistiendo
de no sé qué ropajes.
Y la fui odiando, sin saberlo.

Llegó a ser una reina,
fastuosa de tesoros
¡Qué iracundia de yel y sin sentido!

Mas se fue desnudando.
Y yo le sonreía.

Se quedó con la túnica
de su inocencia antigua.
Creí de nuevo en ella.

Y se quitó la túnica,
y apareció desnuda toda
¡Oh pasión de mi vida, poesía
desnuda, mía para siempre!

(Por que las buenas costumbres no deberían perderse nunca por el camino).